Posicionamiento del COIBA sobre la idoneidad de realizar test de antígenos en las farmacias
La crisis generada por la covid-19 ha supuesto la reorganización y adaptación de los recursos sanitarios públicos y privados. Pero antes de tomar una decisión y ofrecer servicios en otras áreas, es necesario realizar un análisis de la situación y, sobre todo, evaluar si es necesario justificar esta medida.
Actualmente el gobierno defiende que tiene la capacidad de realizar las pruebas de antígenos en el sistema público, actividad prestada en los centros de salud, que trabajan en coordinación con hospitales, Salud Pública y el Centro de Coordinación de Coronavirus de las Islas Baleares.
Por otro lado, las farmacias no están preparadas para realizar test de antígenos, ya que no cuentan con los espacios adecuados ni las medidas técnicas organizativas necesarias para garantizar la seguridad de los usuarios, los trabajadores y la calidad de las pruebas. Es necesario tener el espacio y las condiciones precisas para evitar el contagio cruzado. La toma de muestras debe llevarse a cabo garantizando la seguridad, es decir, con equipos de protección individuales, doble circuito, ventilación y uso exclusivo de la zona habilitada para el muestreo. Además, el muestreo debe ser realizado por profesionales cualificados.
No debemos olvidar que el test de antígenos es una prueba complementaria, es necesaria una evaluación de los síntomas y del estado general del paciente, así como la interpretación del resultado por parte de un profesional de la salud en el ámbito clínico.
También es necesario que exista comunicación y coordinación con los centros de salud, hospitales, salud pública y el centro de coordinación covid de las Islas Baleares (servicios de salud pública) que garantice la notificación de casos positivos y el estudio de contactos estrechos, así como la existencia de brotes.
Las administraciones públicas deben orientar sus acciones realizando un análisis preliminar y buscar soluciones sin ceder a las presiones de las empresas privadas con intenciones comerciales.
En esta etapa fundamental de la lucha contra la Covid-19 es esencial fortalecer los recursos de salud pública en lugar de privatizarlos.
Además, la transferencia de dinero público a través de más actividades concertadas a empresas privadas, representa un aumento del gasto que sería mejor empleado en la mejora cuantitativa y cualitativa de las plantillas de profesionales.
Por ello, el Colegio Oficial de Enfermería de las Islas Baleares muestra su oposición a la realización de pruebas de antígeno en farmacias por no estar debidamente habilitadas para este fin, suponiendo un riesgo añadido de contagio por parte de ciudadanos y profesionales de la farmacia, además de la privatización de un servicio que debe ser público.